Queridos amigos:
Corriendo estos tiempos, en los que aparentemente la tierra se encuentra en una situación de azoramiento e inestabilidad. La Segunda Fundación os manda este saludo, como comienzo de sus actividades.
Bien es cierto, que mucho habría que decir de la situación política – global, de la situación económica, de los desastres mundiales, del poder y del hambre en el mundo, de la Nueva Era, etc, etc…. La Segunda Fundación no nace para ocuparse de nada de esto, sino para ocuparse de la evolución futura del hombre. Sabemos que éste es el verdadero objetivo de la Naturaleza en sus obras, sabemos que el hombre aún es ignorante en las suyas. Esta ignorancia que aparentemente prevalece, no está exenta de vislumbres aislados y excepcionales. Por nuestra propia experiencia, ahora sabemos que existen seres humanos, distraidos de la Sociedad, con una gran aspiración en el SABER; buscadores de una VERDAD, que ni ellos mismos confían racionalmente en encontrar; aunque recurrentemente su voluntad les empuja en esa dirección.
Hemos descubierto un Yo interior que empuja en esa dirección, sabemos que en algunos hombres este Yo es muy insistente. Hemos descubierto algunos aspectos de nuestra voluntad, que nos llevan a realizar búsquedas aparentemente irracionales; (aunque más bien habría que decir que las personas que nos rodean no comprenden el porqué de tal lectura, tal costumbre, tal viaje o tal compañía …) están provocadas por un impulso NATURAL que quiere expresarse en nosotros mismos y, que en realidad es el aviso o NOTICIA de que la Naturaleza (que también somos nosotros mismos) sigue en su proceso evolutivo sin descubrirnos nada. Su proceso consiste en empujarnos para que nosotros mismos seamos los descubridores; siendo así conscientes del obrar de la Naturaleza en nosotros, podemos empezar a comprender el porqué de determinadas actitudes nuestras, ideales, movimientos, ilusiones, sueños, incluso de nuestra forma especial de llorar. …
Quisiéramos deciros tantas cosas; en fin, si os parece continuaremos hablando de EVOLUCIÓN.
El las prístinas etapas de la Naturaleza evolutiva nos encontramos con la muda intimidad de su inconciencia; no hay revelación de significado o propósito alguno en sus obras, ni sugestión de cualquier otro principio del ser que esa primera formulación que es su primera preocupación inmediata y parece ser por siempre su único cometido: pues en sus primeras obras aparece la Materia sola, la única realidad muda y rígida. Un Testigo de la creación, si hubiese habido uno consciente pero instruido, sólo habría visto aparecer de un vasto abismo de una aparente no-existencia una Energía ocupada en la creación de la Materia, un mundo material y objetos materiales, organizando la infinitud del Inconsciente dentro del esquema de un ilimitado universo o sistema de incontables universos expandiéndose en su torno en el Espacio sin ningún fin ni límite ciertos, una infatigable creación de nebulosas galaxias, soles y planetas, existentes solos por sí, sin sentido en sí, vacíos de causa o propósito. Podría haberle parecido una estupenda maquinaria sin uso, un potente movimiento ininteligible, un eónico espectáculo sin testigo, un cósmico edificio sin habitante; pues no habría visto señal de un Espíritu inmanente, ni al ser para cuyo deleite fue constituido. Una creación de esta índole podría ser solamente juego de sombras o de marionetas de formas reflejadas en un indiferente Absoluto superconsciente. No habría visto la evidencia de un alma ni una sugestión de la mente o la vida en este inmensurable e indeterminable despliegue de la Materia. No le habría parecido posible ni imaginable que pudiese existir en este desierto universo, por siempre inanimado e insensible, una eclosión de vida en abundancia, una vibración primera de algo oculto e incalculable, vivo y consciente, una secreta entidad espiritual haciendo rumbo hacia la superficie.
Pero tras algunos eones, observando una vez más ese vano panorama, podría haber detectado al menos en un pequeño rincón del universo este fenómeno, un rincón donde la Materia se hubiese preparado sus operaciones suficientemente fijas, organizadas, estables, adaptadas como escenario de un nuevo desarrollo, el fenómeno de una materia viviente, una vida en las cosas, que emergió y se tornó visible: pero el Testigo aun no habría entendido nada, pues la Naturaleza preocupada solamente de establecer su eclosión vital, esta nueva creación, la vida viviendo por sí sin significación alguna en ella – una traviesa y abundante creadora ocupada en esparcir la semilla de su nuevo poder y estableciendo una multitud de sus formas en una bella y exuberante profusión, o después, multiplicando interminablemente género y especie por el puro placer de la creación, como si en el inmenso desierto cósmico se hubiese ensayado un pequeño toque de vívido color y movimiento y nada más. El Testigo no podría haber imaginado que una mente pensante aparecería en esta diminuta isla de vida, que una conciencia despertaría en el Inconsciente, que una nueva y mayor vibración más sutil llegaría a la superficie y delataría claramente la existencia del Espíritu sumergido. Al principio le hubiese parecido que la Vida había tomado consciencia, de algún modo, de sí misma y de que era todo; pues esta escasa mente recién nacida parecería ser solamente sierva de la vida, un artificio para ayudar a la vida a vivir, una maquinaria para mantenimiento, para ataque y defensa, para ciertas necesidades y satisfacciones vitales, para la liberación del instinto-vital y del impulso-vital. No podría haberle parecido posible que en esta pequeña vida, tan inconspicua en medio de las inmensidades, en una sola especie de esta insignificante multitud, un ser mental emergería, una mente sirviendo a la vida pero también convirtiendo a la vida y la materia en sus siervas, usándolas para el logro de sus propias ideas, voluntad, deseos – un ser mental que crearía todo género de utensilios, herramientas, instrumentos de la Materia para toda la clase de utilidades, erigiría con ellas ciudades, casas, templos, teatros, laboratorios, fábricas, cincelaría en ella las estatuas y esculpiría catedrales, inventaría la arquitectura, la escultura, la pintura, la poesía de cientos de artesanías y artes, descubrirá la matemática y la física del universo, y el secreto oculto de su estructura, viviría merced a la mente y sus intereses, pues el pensamiento y el conocimiento, se desarrollan en el pensador, el filósofo y el científico y, como supremo desafío al reino de la Materia, despiertan en él la Deidad oculta convirtiéndolo en el que está a la caza de lo invisible, en el místico y el indagador espiritual.
Pero si tras diversas edades o ciclos el Testigo hubiese mirado otra vez y visto este milagro en pleno proceso, incluso entonces quizás, oscurecido por su experiencia original de la realidad única de la Materia en el universo, todavía no habría entendido, aún le parecería imposible que el Espíritu oculto, pudiese emerger plenamente, completarse en su conciencia, y morar en la tierra como el autoconocedor y el conocedor-del-mundo, el regidor y el dueño de la naturaleza. “¡Imposible!”, diría “todo lo ocurrido no es nada, una burbujita de sensitiva materia gris cerebral, un raro capricho en una porción de Materia inanimada que se desplaza en un motivo del universo”. Por el contrario, un nuevo Testigo que interviniera al fin de la historia, informado de los pasados desarrollos pero no obsesionado por la decepción del principio, gritaría: “Ah, entonces este fue el milagro que se intentaba, el último de muchos – el Espíritu que estaba sumergido en la Inconsciencia, salió de ella y ahora habita revelado, la forma de las cosas, que veladas, creó como su residencia y escenario de su emerger”. Pero de hecho, un Testigo más consciente, podría haber descubierto la clave en este periodo primitivo de desenvolvimiento, incluso en cada paso de su proceso; pues en cada etapa, el mudo secreto de la naturaleza, aunque todavía allí, disminuye; se aporta una sugerencia del paso siguiente; resulta visible una preparación más abiertamente significativa. Ya son visibles, en lo que parece estar inconsciente en la vida, los signos de la sensación que llegan a la superficie; al moverse y respirar vida el emerger de la mente sensitiva es aparente y la preparación de la mente pensante no está enteramente oculta, mientras que la mente pensante, cuando se desarrolla, aparecen en una primitiva etapa pujas rudimentarias y después las más desarrolladas búsquedas de una conciencia espiritual. Así como la vida vegetal contiene en sí la oscura posibilidad del animal consciente, así como la mente animal acciona con los movimientos de la sensación y percepción y los rudimentos de la concepción que son primer cimiento del hombre que piensa, de igual manera el hombre, el ser mental, es sublimado por el esfuerzo de la Energía evolutiva para desarrollar de él al hombre espiritual, al ser plenamente consciente, el hombre que supera su primer yo material y que es descubridor de su verdadero yo y su naturaleza más excelsa.
Más si esto ha de aceptarse como la intención de la Naturaleza, hay dos cuestiones que se plantean a la vez y reclaman una respuesta definitiva – primero, la naturaleza exacta de la transición desde el ser mental al ser espiritual y, el proceso y método de la evolución del hombre desde el ser mental. A primera vista, parecería evidente que así como cada graduación emerge no sólo de su grado precedente sino también en él, así como cada vida emerge en la materia y está en gran medida limitada y determinada en su autoexpresión por sus condiciones materiales, así como la mente emerge en la vida-en-la-materia y está de modo parecido limitada y determinada en su autoexpresión por las condiciones vitales y las condiciones materiales, de igual modo el espíritu también debe emerger en una mente corporizada en la vida-en-la-materia y debe en gran medida ser limitada y determinada por las condiciones mentales en las que tienen sus raíces, al igual que las condiciones vitales, las condiciones materiales de su existencia aquí. Podría incluso sostenerse que, si hubo alguna evolución de lo espiritual en nosotros, es sólo parte de la evolución mental, una operación especial de la mentalidad del hombre; el elemento espiritual no es una entidad distinta o separada y no puede tener un emerger independiente ni un futuro supramental. El ser mental puede desarrollar un interés o preocupación espiritual con una mentalidad intelectual, fino mirasol de su vida mental, lo espiritual puede convertirse en tendencia predominante en algunos hombres tal y como en otros hay una predominante tendencia artística o pragmática; pero no puede existir una cosa tal como un ser espiritual que asume y transforma la naturaleza mental en naturaleza espiritual. No hay evolución del hombre espiritual; hay solo evolución de un nuevo y posiblemente más fino y más raro elemento en el ser mental. Esto es entonces lo que ha de procurarse – la clara distinción entre lo espiritual y lo mental, la naturaleza de esta evolución y los factores que hacen posible e inevitable que existiera este emerger del espíritu en su carácter verdadero y distinto, no quedando, como ahora ocurre con su mayor parte en su proceso o parece serlo en su modalidad aparente, como característica subordinada o dominante de nuestra mentalidad, sino definiéndose como un nuevo poder que finalmente dominará la parte mental y la reemplazará como conductor de la vida y la naturaleza.
La sustancia original y fundamento de nuestro Universo es la Materia, el primer principio establecido y totalmente condicionante es la Materia. Si aceptamos que la evolución toma lugar en un Universo Material, la Mente y la Vida evolucionarán desde la Materia, pero ambas son obligadas de usar la sustancia material para su instrumentación y están sujetas a la ley de la Naturaleza material hasta cuando modificasen lo que sufren y usan. La Vida transforma la sustancia material en sustancia viviente y la Mente en sustancia consciente; consiguen modificar la inercia, inmovilidad e inconsciencia de la Materia en movimiento de la vida, el sentimiento y la consciencia. Empero la Vida y la Mente no logran cambiar la materia por completo; no pueden convertirla en totalmente viviente (Inmortal) o totalmente consciente (gnóstica); la naturaleza VITAL que evoluciona, está condicionada por la muerte, la materia que evoluciona materializa y vitaliza, está enraizada en la inconsciencia y limitada en la ignorancia; es mecanizada por las fuerzas físicas y químicas de las que dependen para autoexpresarse y es movida por incontroladas fuerzas vitales que la manejan y usan. Esto es señal de que ni la Vida ni la Mente son Original Poder Creador; ambas, como la Materia son poderes intermediarios, instrumentos sucesivos y seriados del proceso evolutivo: materia, vida, mente.
Si estas sustancias no son el poder original, debemos aceptar o buscar algo por encima de la mente y la vida, debe haber una Realidad evolutiva para revelar que aún habrá de revelarse en la Naturaleza.
De la inconsciencia o Nesciencia Material brota la Vida, más la vida no logra poder suficiente para mantenerse y salir de la falta de conocimiento y recurrentemente vuelve a su origen material, en una sucesión de ciclos que aparentemente es interminable. La Mente brota de esa vida materializada y pugna por elevarla, pero sin conseguir dominio; la mente tal y como la vemos no es pura y libre, sino nublada y disminuida por la envolvente nesciencia, la mente se afana y pugna por liberar el conocimiento envuelto en la sustancia vital material.
El animal asume en sí la materia viva e inanimada, el hombre asume ambas junto con la existencia animal, cada nueva forma evolutiva asume lo que estaba antes.
Cada nueva sustancia o poder intermediario que se instala o desenvuelve en el proceso evolutivo aporta su propia Ley y asume la Ley de los anteriores. De tal manera que está limitada por lo que asume y al mismo tiempo penetra y pugna por modificar lo que soporta.
Mediante un proceso imperceptible por la gran mayoría de nosotros, la Consciencia evoluciona pasando de un grado a otro, autodesarrollándose en este universo material, mediante su gran aventura, la gran aventura de la Consciencia. Cualquiera que sea la sustancia o el medio, la consciencia secretamente inmanente en la Materia, el Habitante oculto, es capaz de esa manera de efectuar su camino hacia arriba, desde las gradaciones inferiores hasta las superiores, asumiendo lo que fue, en lo que es en cada momento y preparando a lo que fue y lo que es para lo que será. ….
El futuro de la evolución humana y su posible aceleración son fundamento dinámico en la constitución y obras de La Segunda Fundación.
La Segunda Fundación SALUDA a todos los hombres de buena voluntad, cuya aspiración les empuje hacia las fronteras de lo desconocido; SALUDA a los buscadores pioneros de un mundo nuevo que está por HACER; SALUDA a los “locos” no conformes con esta vida, desertores de lo establecido, renunciantes del conservadurismo social; SALUDA a los visionarios y espiritualistas anunciadores de lo que no se quiere ver; SALUDA a las almas viejas y fuertes, que lloran por lo que nadie llora, que ni ellas mismas entienden porqué son así, y les invita a que despierten, pues esa forma de llorar corresponde a los empresarios que construirán la nueva tierra, los que tienen un experiencia sobre sus espaldas, los que sufren por lo que nadie sufre, los que triunfan sin necesidad de triunfar, los que saben que pueden sin saber para que poder, los que están preparados para darse a los demás, los que están deseando sacrificarse por el destino de la humanidad (si encuentran la VERDAD). La Segunda Fundación os saluda.
La Segunda Fundación es la concreción DINAMICA de un proceso psíquico, por el que hemos sido guiados, nuestro eterno agradecimiento a los que nos han impulsado.
En especial y con gran cariño hacia el gran científico – visionario Isaac Asimov, desde aquí, desde La Segunda Fundación le hacemos un guiño cómplice.
El hombre psíquico, el hombre espiritual tiene que autodesarrollarse, con su aparición la humanidad dará el gran salto adelante; pudiera ser que la indolente, sonámbula y adormecida humanidad de hoy, cayera al lado del camino, olvidándose del esfuerzo y sacrificio de los predecesores; pudiera ser que el hombre de hoy asustado y enfermizo psicológico, tuviera como únicos valores de su “vida” el sueldo seguro y la seguridad social.
Pero en el día de hoy, hay hombres que aborrecen este tipo de vida insustancial, son conscientes de que nacemos con todo perdido, que al final la muerte acaba con la seguridad, y que sólo merece la pena derribar los imposibles.
Estos hombres son la esperanza del mañana, son los constructores de la nueva tierra, son incomprendidos, inadaptados socialmente, criticados por quienes dicen quererlos, se sienten raros, su entorno social le es ajeno, no entiende de componendas, ni de pasteleos, vibran con una conversación inteligente (casi imposible), sueñan con logros “irrealizables”, sus ideales aparentemente son utópicos, quieren la verdad, son buscadores de un nuevo sol, han desarrollado su intelecto y su razón, están o han caminado en las sendas del agnosticismo, o del materialismo, o del ateísmo, o del espiritualismo, tienen ESPERANZA auque no vislumbren signos.
Y la ESPERANZA es el motor del cambio, porque es una INTUICION, es una fe que no se siente conscientemente, pero es la FE que siempre ha movido al mundo y lo volverá a mover.
Mañana estos hombres se conocerán, se acercarán, durante un largo periodo, limarán sus asperezas, reconocerán la UNIDAD en sus diferencias, progresarán bajo el baluarte de la Verdad, comprenderán primero que para transformar el mundo, tendrán que transformarse ellos, se interiorizarán buscando la verdad dentro de sí, conocerán de que sustancia están creados y estallará en cada uno de ellos el hombre psíquico que les está prometido; entenderán porqué sus emociones son distintas, porque aparentemente son inemotivos, y cuando se emocionan los demás no les entienden. Descubrirán que la luz de sus emociones es blanca a diferencia de la emoción normal que es roja. La luz roja es de una gran intensidad y fuego pero nada comparable con la luminosidad de la luz blanca. La luz purificada de la Mente será la que aportará Luz y Pureza al corazón.
Mañana a estos hombres la VERDAD les hará libres, desarrollarán su PSIQUE y emprenderán el camino que llevará al incompleto hombre mental hasta el integral hombre espiritual psíquicamente pleno, lleno de CONOCIMIENTO.
Mañana estos hombres entenderán y serán conscientes del altísimo significado del AMOR, la gran ley de la UNION que desarrolló a través de los escritos del apóstol JUAN, nuestro SEÑOR JESUS y comenzarán el trabajo de la UNIDAD hasta que sean lo que son: UNO solo.
Mañana estos hombres entenderán y serán conscientes del altísimo significado de la COMPASION, el gran sacrificio de nuestro SEÑOR BUDA, el que habiéndose alzado hasta el plano espiritual del Nirvana o NO SER; decidió volver y reencarnar en la tierra y formuló el voto de hacer que el irrevocable cruce se prolongase mientras existiese sobre la tierra un solo ser no liberado del nudo del sufrimiento, del cautiverio del Ego.
Mañana estos hombres entenderán y serán conscientes del altísimo significado del CONOCIMIENTO, el gran legado de nuestro SEÑOR KRISHNA, el cual les devolverá al campo de batalla; el coloquio sobre el campo de batalla de Kurukshetra ha de liberar definitivamente a la humanidad.
Dicen, que LOS SEÑORES no han existido, dicen que los escritos que relatan sus acontecimientos son un fraude. Demos gracias a Dios por este fraude y postrémonos ante sus inventores.
Hay que darse prisa en desprenderse de los fardos, porque el mañana es siempre hoy. Conseguir el “imposible” es lo único que merece la pena. Ya está bien, llevamos acumulando durante millones de años cadáveres sobre cadáveres.
LA SEGUNDA FUNDACION quiere SERVIR de instrumento, ayuda, etc…. capaz de dinamizar e integrar los esfuerzos tendentes a incrementar y/o acelerar la evolución humana en pos de alcanzar La Vida Divina sobre la tierra. Una aproximación intelectual al mas elevado conocimiento, la posesión mental de él, es ayuda indispensable para este movimiento de la Naturaleza en el ser humano. Ordinariamente, en nuestra superficie, el principal instrumento humano del pensamiento y la acción es la razón, la observación, el intelecto comprensivo y dispositivo. En cualquier avance o evolución total del espíritu no sólo ha de desarrollarse la intuición, la introspección, el sentido interior, la devoción afectiva, la profunda y directa experiencia – vital de las cosas del espíritu, sino que también el intelecto debe iluminarse y satisfacerse; nuestra mente pensante y reflexiva debe ser ayudada a entender, a formar una idea razonada y sistematizada de la meta, del método, de los principios de este desarrollo y actividad supremos de nuestra naturaleza y la verdad de todo lo que está detrás de ello.
Rogamos por ello al Padre, para que nos ayude y nos proteja de dogmatismos y nos saque de los errores que cometeremos. Padre ya sabes lo imperfectos que somos, también sabes que nuestra aspiración es sincera, aunque es poco lo que te podemos ofrecer, te pedimos que nos uses, porque esta vida que vivimos ya dura demasiado, la ignorancia, el dolor y el sufrimiento tienen que acabar en el mundo, y sabemos que ésto es lo que TU quieres.
También rogamos nos excusen, aquellas personas que bien le hayamos hecho perder su tiempo, bien pudiéramos haberles molestado con alguna de nuestras consideraciones. En nuestro afán de información y búsqueda más de una vez meteremos la pata aún sin menesterlo.
“La llegada de una época de espiritualidad debe estar precedida de la aparición de un número de individuos que han dejado de estar satisfechos con la existencia corriente del hombre tanto a nivel intelectual como vital y físico”, escribió Sri Aurobindo hace ocho décadas. Estos individuos son aquellos que ya no soportan las mentiras y la inverosimilitud casi irreal de toda esta locura de vida, porque algo en su interior sabe que puede ser de otra manera y que ha llegado el momento de esa otra manera. En su interior tienen una laguna que la Madre llamaba “Necesidad” – la necesidad apremiante de la Realidad que es el hambre para el sustento del alma. Esta necesidad es el signo del ser psíquico maduro. Tal Necesidad es guiada inexorablemente a su lugar propio y a la contribución en la construcción del Mundo Nuevo, muchas veces por una coincidencia poco probable – una palabra, un encuentro, un libro, el artículo de un periódico en un papel que envuelve un par de zapatos. Pues es por esta contribución específica que ha vuelto otra vez al mundo, y encontrará a los seres psíquicos de mente afín, incluso si la mayoría de ellos todavía va de incógnito entre la masa o dentro de una comunidad religiosa o espiritual. Porque pertenece al grupo planetario de aquellos que han sido enviados. Y bajo el estrépito ensordecedor de un mundo de trabajo, discernirá la llamada pura que llena los ojos de lágrimas de Gozo, porque la llamada dirá que Eso está presente en este mundo y que en adelante la vida dejará de ser un arrastrarse y será un vuelo ilimitado, con grandes alas, luminosas y coloristas.
Queridos amigos, aquí estamos, las líneas están abiertas, el camino abierto para andarlo; todas las acciones llevan a alguna parte; nuestra aspiración y concentración se están ordenando en el GRAN SENTIDO. Gracias por vuestra atención. QUEDAMOS DE VOSOTROS.